domingo, 25 de julio de 2010

El tren llega a Boulogne

El ramal de Ferrovías que va de Villa Rosa a Retiro es una verdadera rareza. Fue el único construido desde el interior hacia la capital argentina y exigió un enorme movimiento de tierra por la zona que se eligió para el ingreso a la terminal de Retiro.
 
Fue construido por la compañía Rosario a Buenos Aires, luego denominada Central Córdoba Extensión a Buenos Aires con el objeto de unir la líneas del Central Córdoba del interior del país, en Rosario, con el puerto de Buenos Aires.
 

Coche Dormitorio D5

Su construcción se dispuso por Ley 4255 del 8 de octubre de 1903. El ramal debía partir del empalme del Ferrocarril Central Córdoba con el Ferrocarril Córdoba y Rosario, en la ciudad de Rosario, y tenía que tomar rumbo hacia Buenos Aires corriendo entre este último y la línea que unía Luján con Pergamino, del Central Argentino, hasta empalmar las vías neutrales de entrada al puerto. En Rosario las obras se iniciaron en 1906 a partir la curva este-norte que describe la línea del Ferrocarril Córdoba y Rosario en cercanía de su cruce con la avenida Godoy.
 
Coche Restaurante
El difícil acceso al puerto estaba contemplado en el artículo dos de la citada ley, que establecía que las vías podían engancharse con las del Ferrocarril Buenos Aires al Pacífico por medio de un tercer riel, dada la diferencia de trocha: ancha para este último y angosta para el Central Córdoba.
 
Al Ferrocarril Pacífico se le había autorizado a ganar terrenos al río de la Plata a fin de establecer una terminal más cerca del puerto. De esta forma cruzaba por arriba al Central Argentino en lo que actualmente es la estación Saldías del ex Ferrocarril Belgrano (actual Ferrovías). La ley había contemplado una franja de 35 metros de ancho entre el Central Argentino y el Pacífico para levantar una estación para el ferrocarril de trocha angosta.
 
Cocina N° 1
Sin embargo, el Central Córdoba no aceptó compartir un riel con el Pacífico y optó por una variante independiente desde la altura de Pilar. Se la conoció como variante número cinco y arrancaba desde el kilómetro 73 contados desde Retiro. Esta decisión fue aprobada el 5 de abril de 1906. Ese mismo año, la empresa compra terrenos en Boulogne para levantar los talleres.
 
Las fotos que ven en esta nota pertenecen a la Fundación Museo Ferroviario. Agradecemos a su director Jorge Wadell. Muestran a coches originales de la línea, que pasaron por la flamante estación Boulogne en los principios: la cocina número uno, el restaurante para 48 pasajeros con depósito de hielo y estantes para botellas y el coche dormitorio D5. Fueron fabricados por Voulcan Foundry y llevan las inscripciones originales del Ferrocarril Central Córdoba Extensión Buenos Aires, lo que implica que son anteriores a 1913. En próximos capítulos seguiremos con esta historia del tren y Boulogne.

Néstor Saavedra.